Delirio de persecusión

El delirio de persecución es una plaga en las mentes ignorantes e infelices. Ahí tienen, cuando un niño llama la atención pegándole a la niña que le gusta, o cuando una niña quiere llamar la atención fingiendo estar enferma. Pero en el caso de Espino, su mente es diferente. Se sabe estar lejos de los reflectores, lejos de los delincuentes fotógrafos aka paparazzis. ¿Qué hacer?

El delirio de persecución es una plaga en las mentes ignorantes e infelices. Ahí tienen, cuando un niño llama la atención pegándole a la niña que le gusta, o cuando una niña quiere llamar la atención fingiendo estar enferma. Pero en el caso de Espino, su mente es diferente. Se sabe estar lejos de los reflectores, lejos de los delincuentes fotógrafos aka paparazzis. ¿Qué hacer? ¿Qué hacer si un Espino no es una espina? Una espina no puede fingir nada, porque su labor es muy clara: espinar al idiota que la agarre. ¿Pero y Espino? Espino no puede llamar la atención sin fingir, sin fingir un delirio de persecusión. O quizá sí lo tenga. Le destruyen las sienes el pensar que una espina, sin tener que fingir llama la atención y él, aún fingiendo, no lo siguen ni los perros pa echarle una meadita =3. Pero su destino había de cambiar, pensó. Por eso, lo mejor que hizo fue entablar una amistad muy amistosa con el magnate Mohamed Al Fayed. Problema resuelto. Por un lado, Al Fayed jura y perjura que la corono britànica conspirò para deshacerse de si hijo y de la desaparecida Lady Di; bueno la princesa era importante y bella, pero ¿Dodi? No era ni bello ni importante, era uno más del montón de ricos buenos para nada. Y el buen Espino, bueno, pues podrìamos decir que es un bueno para nada. Asì muchos "buenos".
Ambos padeciendo de un terrible delirio de persecución; paranoia e imbecilidad causan simbiosis y su delirio lo retroalimentan. Así y sólo así, logró tener a alguien que le crea que es perseguido por los "capos" del azulejo 4 ojos narices de bola.