Los decibeles
Etiquetas: Ajolote, número 01 1 comentariosExisten al menos dos características que hacen de este software especialmente útil para la captura del sonido, escuchaba Felipe mientras veía atento a su maestro de ingeniería en audio. Para cuando el ventilador de una computadora a su lado se encendió (68dB) Felipe había perdido el hilo de todo lo que el profe Barcia trataba de explicar. Al voltear por la ventana confirmó que lo único verde en esta ciudad son los bocho taxis, aquellos en los que si el chofer frena, uno se estampa contra el parabrisas (80dB).
— Existen al menos dos características que hacen de este software especialmente útil para la captura del sonido, escuchaba Felipe mientras veía atento a su maestro de ingeniería en audio.
Para cuando el ventilador de una computadora a su lado se encendió (68dB) Felipe había perdido el hilo de todo lo que el profe Barcia trataba de explicar. Al voltear por la ventana confirmó que lo único verde en esta ciudad son los bocho taxis, aquellos en los que si el chofer frena, uno se estampa contra el parabrisas (80dB).
Sentía la necesidad de salir corriendo de ese lugar. Y así lo hizo. Aquel día Felipe no fue a casa de su Abuela a comer como todos los jueves (58dB), ni alcanzó por la noche al Topo y al Reve que lo esperaban afuera del metro Juárez para ver tocar a la Bersuit (110dB).
Tomo su bicicleta de madrugada y fue a casa de Alejandra aquien no veía desde hacía cuatro años que dormía (20dB). Primero tiró unas piedritas a la ventana (15db), después chifló (18db) y sólo cuando gritó “¡Aleeee!” (30db) ella se asomó a la ventana. —¿Qué pasó?, preguntó ella. —Necesito saber si todavía piensas en mi, le contestó. Hubo un silencio (0dB). —La verdad… Estaba soñando contigo, respondió ella. Y Felipe pensó que debería existir un software con la característica especial de capturar ese momento (¿?dB).
23 de julio de 2008, 9:24
Buenísimo!